El Bernabéu volvió a convertirse en el epicentro mundial del espectáculo tras acoger un evento que no solo sorprendió por su magnitud, sino también por el impacto que generó a nivel social, económico y mediático. Según los datos analizados, el Madrid Game, disputado el pasado 16 de Noviembre, es ya parte de la historia de España y de la NFL, cuyo comisionado, Roger Goodell, calificó el Bernabéu "como el mejor estadio del mundo".
Ganaron los locales, los Miami Dolphins, a los Washington Commanders dando la vuelta al marcador en la prórroga (13-16) y demostrando que el efecto Bernabéu va mucho más allá del fútbol.
El evento alcanzó cifras históricas de seguimiento, convirtiéndose en el quinto partido más visto en los 20 años de historia de los International Games de la NFL. Más de 6 millones de espectadores de 223 países disfrutaron de un día inolvidable, a los que se suman los 78.610 que tuvieron la suerte de ser parte del espectáculo desde la grada. Se trata de la mayor asistencia al estadio desde su reciente remodelación.
Esto se reflejó también en la conversación digital, donde el impacto en redes sociales fue comparable al de las grandes citas futbolísticas (más de 100,000 conversaciones), reforzando el papel del Bernabéu como generador de audiencias masivas y emociones colectivas independientemente del espectáculo que se celebre en su interior.
Majestuoso, sobrecogedor, colosal, espectacular, impresionante son algunos de los adjetivos con los que la prensa mundial han calificado al Bernabéu y su increíble transformación en menos de una semana para acoger un partido oficial de fútbol americano.
Especial admiración mundial levantó el hipogeo, que permitió que el partido se disputara sobre césped natural gracias a la excelente preservación y conservación que permite este sistema de guardado del terreno de juego.
Más allá del alcance mediático, el encuentro celebrado en el Bernabéu supuso además un impulso económico notable para Madrid. Las autoridades locales lo han cifrado en un impacto superior a los 70 millones de euros para la ciudad, una cifra que subraya el valor del estadio como motor de desarrollo urbano, dinamizador del turismo y herramienta estratégica para proyectar la imagen de la capital al mundo.
El Bernabéu se consagra así como referente global. Su capacidad para transformar cualquier evento en un acontecimiento inolvidable demuestra que el estadio es ya uno de los recintos multiusos más importantes del planeta, capaz de combinar innovación, emoción y rentabilidad en cada cita que acoge. Madrid y su icono arquitectónico siguen escribiendo juntos páginas de historia.
